jueves, 16 de julio de 2009

Mito de la media Naranja


¿Os habéis preguntado alguna vez de dónde procede la expresión "media naranja"? Pues procede de un antiguo mito griego que dice que en un principio los humanos teníamos dos cabezas, cuatro brazos, cuatro piernas, dos sexos, en fin, el doble de todo. Éramos tan poderosos que los mismos dioses del Olimpo, los cuales nos habían creado, comenzaron a tener miedo de nosotros. Entonces tomaron la decisión de partirnos por la mitad para que no supusiéramos una amenaza para ellos. Cuenta la mitología que desde entonces pasamos la vida desde que nacemos buscando la otra mitad que nos falta hasta que la encontramos y nos sentimos completos.

Es realmente curioso, teniendo en cuenta que uno de nuestros grandes objetivos en la vida es encontrar a esa persona que nos completa, nuestra "media naranja". Pero esto es un tópico y tarde o temprano se descubre que la otra mitad no es lisa, sino que tiene asperezas. Sin embargo, sí es complementaria y fruto de los roces, el esfuerzo y el empeño de los dos, se adaptarán y se harán dos superficies únicas complementarias, dos mitades perfectas.

Hay una frase que me gusta que dice que no somos los que decidimos que el amor comience, pero sí que se mantenga y dure. Un proceso que exige de todo menos inactividad. Por eso el mito de la media naranja es un engaño peligroso si nos lleva a pensar que existe alguien que va a encajar perfectamente con nuestro modo de ser, actuar y sentir, como si la vida fuera algo inmutable e inmóvil.

Encuentran la felicidad quienes consiguen mantener su amor hasta blindarlo, con todo el esfuerzo que eso supone.

Majo

1 comentario:

Carmina dijo...

Yo aún diría más. No existen las medias naranjas, sino un contexto espacial y temporal limitado. Hay muchos hombres susceptibles de ser el hombre perfecto, pero contamos con unas circunstancias concretas para conocerlo. Y además, cuando le ves, no hay musiquita hollywoodiense, nenas. Eso sí, es lo más bonito del mundo...

Besos a todas!