lunes, 15 de diciembre de 2008

Demasiado sexo en la tele


Al hilo del post de ayer, me gustaría comentaros un artículo que leí en La Gaceta de los Negocios la semana pasada. El periódico recoge en un artículo el primer estudio empírico a nivel mundial sobre la relación entre “la exposición a contenidos sexuales televisivos y el embarazo adolescente”, que apareció en el número de noviembre de la revista Pediatrics, órgano oficial de la Academia Americana de Pediatría. El estudio, realizado por siete investigadores, evalúa la relación entre “sexo televisivo” y conducta juvenil. Y la conclusión es clara. Encuestas a 2.003 chicos y chicas entre 12 y 17 años revelaron que aquellos “expuestos a altos niveles de contenido sexual televisivo” (90%) dobló a la de aquéllos cuya “exposición” fue del 10%.

Mientras Soria recurre al rap del condón, el estudio de Pediatrics afirma que los padres “pueden mitigar la influencia del contenido sexual viendo la TV con sus hijos y discutiendo la forma como se representa el sexo, equilibrándola con información sobre sus posibles consecuencias negativas”. Menos anuncios grotescos que lo único que hacen es promover la promiscuidad (y, de paso, aumentar las ventas de las grandes empresas de preservativos) y ofrecer una imagen irreal del sexo, y más intervención en la parrilla televisiva, en donde hay una escena sexual cada diez minutos.

Lucía

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Tengo una hija de 16 años y cuando nos sentamos juntas a ver un rato la TV, es más que difícil encontrar un canal que ofrezca una serie que valga la pena.
Todas las series con las que un adolescente se puede identificar, muestran una distorsionada realidad, ojala se preocuparan un poco más de transmitir valores e historias de verdadero AMOR, pero parece que les interesa más vender el sexo descontextualizado, una pena.
Alguna sugerencia para ver en familia?

Anónimo dijo...

Te tomo la palabra, prometo un post sobre programas y películas que ver en familia!

Álvaro García dijo...

Según lo veo yo, la posibilidad de que un niño pudiera ver la tele sin acabar siendo intoxicado con todo tipo de basura acabó a principios de los años 80 cuando se dejó de emitir programas tipo "Había una vez un circo", "Barrio Sésamo", "David el Gnomo" y "El Equipo A" ... algunos nos hemos salvado por los pelos.